VOLAR ALTO (25212-2306)

Soy como las aves, vuelo muchas veces tan alto que  me vuelvo inalcanzable, y después de tanto viaje, me sigo sintiendo sola y vulnerable. Aún no le encuentro sentido a lo que estoy buscando. Tanto tiempo intentando probar muchas alternativas y a las finales me he quedado sin nada. Soy insegura, algunas veces bipolar, soy una chica que no sabe lo que quiere pero que se la pasa soñando todo el tiempo. Y a veces me pregunto de qué me sirve seguir soñando sino lucho por esos sueños. Por qué me siento prisionera de mis ideas, de mis rencores, de mis malditos miedos. Hay una lucha interna con mi otro yo, porque sonará raro pero en mi interior hay otra persona que algunas veces logra salir y se enfrenta a todo sin importarle nada. Ya no quiero seguir dejando las cosas a medias, tengo ganas de parar el tiempo y pensar en lo que estoy perdiendo, pues ya no hay tiempo para seguir intentándolo más. 

Si soy un ave y siempre estoy volando alto, si ando entre las nubes y respiro aire puro, si mis alas tocan el cielo y bailan con el viento, por qué he de tener miedo todavía, aves como yo hay pocas en el mundo. Yo tengo el poder de volar, se tocar el cielo, yo estoy cerca a Dios, y nadie como yo para lograr lo que deseo, nadie como yo, porque yo soy la mejor y este universo ha de conspirar a mi favor, tengo el poder en mis alitas de colores de pintar mi mundo con realidades; tengo las ganas y la fuerza para atraer a mí lo que siempre he querido y no desmayaré ante ningún obstáculo que se me cruce en el camino. Emprenderé mi vuelo hacia lo más alto porque yo estoy hecha para llegar a lo más alto, ese es mi destino y nada ni nadie lo impedirán. He de contar mi historia a todo aquel que se sienta abatido por las malas jornadas en sus vidas. He de contar mi historia a todas esas personas que viven atemorizadas, confundidas, deprimidas, a todos ellos les digo que no hay nada imposible en esta vida, que todo se puede si ponemos voluntad y disciplina. 

Sé que yo puedo, sé que jamás me he rendido ante nada a pesar de vivir con miedos, sé que siempre he sido fuerte ante las adversidades y que mi vida en resumen es coraje y valentía. Soy muy frágil como un ave, pero también soy muy fuerte como el poder de Dios. Cada vez que escribo algo es como si estuviese dándome consejos, me siento confundida, pero mientras escribo voy diciéndome lo que necesito escuchar y me voy curando con mis letras, me autoanalizo. La decisión estará siempre en mí, nadie puede tomar mi vida y dirigirla a su manera, soy yo quien tiene que dirigir mi vida, porque nadie mejor que yo para saber lo que necesito, nadie mejor que yo para buscar en mi interior las respuestas y empezar desde cero, nadie mejor que yo para darme oportunidades de cambiar y mejorar, nadie mejor que yo para vivir mi vida y hacer de mis días, días mejores, días dichosos. 

Conclusión: Lucharé y seguiré volando alto. 

ANDREA FURIUR  

NO SE PERO TE AMO (17211-2309)

No sé si te amo demasiado y si eso esté mal, algunas personas pensarían que lo mío es una obsesión o un capricho, pero ellos no son yo y jamás entenderán que para mi tú eres una oración, mi religión, que si te amo no es malo, es bueno, porque amarte me hace bien, me da vida y alegría, me da paz. Yo hoy no sé si volveremos a reír juntos algún atardecer taciturno entre cuatro paredes, no sé si la vida nos dará otra oportunidad para volver a dibujar en los espacios grises de mi habitación muchos arcoíris multicolor, no sé si tocaré tus manos, tus labios, tus ojos, tu suave cabello, no sé si te volveré a hacer piojito para que te duermas o si me abrazarás fuerte cuando me duela la barriga, no sé si oiremos música grabada de manera especial para disfrutar una tarde cualquiera o si te cantaré las canciones que te compuse todo este tiempo, no sé mi vida, no sé, solo sé que te amo y que ahora en este preciso momento, me haces demasiada falta, mucha falta. 

ANDREA FURIUR

ORGULLOSA E HISTÉRICA (15212-1620)

Mi orgullo siempre está presente cuando no debería. Mi histeria también, siempre dispuesta a apoyarme, ella nunca me dice que estoy equivocada, me hace barra para que siga defendiendo mis ideas. Y ni hablar de mi típica cara de poto cuando no quiero dar mi brazo a torcer. Todas esas cosas sé que debería cambiar, pero creo que nunca podré porque son parte de mi, tal vez alguna día llegue a controlarlo, o a medirme, pero cambiarlo no creo, pues si lo hago no sería yo, no me reconocerían mis amigos ni mis familiares o la gente que se topa conmigo por ahí y que es testigo de mi carácter explosivo. 

Quien me viera por la calle no pensaría que suelo tener este tipo de reacciones explosivas, es más aparentemente soy muy dulce, y en si también lo soy, pero cuando me llega la hora de renegar por algo me vuelvo un gigante y quiero aplastar a quien este discutiendo conmigo, no me interesa nada y solo defiendo mis ideas a capa y espada y soy muy terca. Luego de estas discusiones me entra un sentido de culpa que detesto porque no quiero sentir eso, pero creo que es porque en el fondo soy muy compasiva, y siempre me siento culpable si lastimo a alguien, eso si no me gusta pero termino haciéndolo. 

Lo bueno de mi es que sé reconocer mis errores a pesar de mi tonto orgullo, soy muy madura para darme cuenta cuando estoy equivocada. Pero también se mantenerme firme con mis ideas cuando sé que la otra parte es la errada. Creo que si uno comete un error y en un momento de cólera no lo logra entender y dice cosas hirientes, tiene la responsabilidad de disculparse, de arreglar el problema. Sé que no todas las personas somos iguales ni sentimos igual, pero justamente es eso lo que nos une con los demás, porque si todos fuéramos iguales no tendríamos la curiosidad de conocer a las personas. 

Hoy he aprendido la lección una vez más y esta vez pensaré un poco antes de reaccionar explosivamente, trataré de controlar mi carácter y seré más tolerante con los demás, dejaré de exigir y ordenar, sobre todo porque no quiero lastimar ni perder a las personas que quiero, y porque un carácter así no me llevará a nada bueno. Sé que para defender mis ideas no necesito levantar la voz ni poner cara de poto, debo usar mi inteligencia para hacer llegar mi ideas de otra manera, solo así haré que valga la pena tanta lucha. Ser obstinada es una cualidad poco recomendable, y si no quieres ser así es mejor controlarte un poco.

ANDREA FURIUR

REGALAME UNA SONRISA (11212-1926)

Es tan fácil regalarle una sonrisa a las personas, parecer loco y que la gente se asuste de ti por no entender tanta felicidad desbordante, es tan fácil que los demás te juzguen pero que al mismo tiempo te envidien por ser así, es tan fácil decirle a alguien lo mucho que lo quieres, que deseas estar a su lado, es tan fácil, pero por qué no lo hacemos, por qué vivimos amargados, por qué cerramos nuestro corazón, si la vida es maravillosa cuando nos levantamos dispuestos a conquistar todo a nuestro paso.

Si supiéramos qué fácil y bueno es vivir con una sonrisa en nuestros rostros, si supiéramos lo hermoso que es vivir enamorado de la vida porque al mismo tiempo enamoramos a los que viven a nuestro alrededor, si supiéramos lo poderoso que es regalar una sonrisa, un buen día a los demás, si supiéramos cuán importante es para las personas que alguien les demuestre interés, si supiéramos que valorando los pequeños detalles estamos ganando más, que no hay nada mejor que decir la verdad, que la vergüenza es el miedo y el miedo es fin de las personas.

Hay que atrevernos a vivir así, hay que dejar las vergüenzas, hay que recordar que la vida es una, que ser feliz es gratis, que no hay mejor medicina que la sonrisa de las personas, que si sonríes así las cosas no salgan bien estas riéndote de la mala suerte y ésta ya no volverá. No vivamos amargados, no nos levantemos todos los días con una sonrisa volteada, no vivamos escondidos de las maravillas de la naturaleza, sal y camina un poco, respira el aire puro de la mañana, disfruta de los detalles, observa todo y pregúntate por ello,  recuerda que la depresión es distracción y que no hay peor cosa que la lamentación.

Disfruta de tu vida y regala sonrisas, verás que serás feliz y harás felices a los demás. No pierdes nada intentándolo pero si lamentándote. Vamos, empieza ahora, regalame una sonrisa. 

ANDREA FURIUR

AMARTE DUELE (11212-1758)

Todo el camino olía a flores y el viento me soplaba al oído mil cosas que no podía decir, mi cabeza y mi corazón estaban en plena batalla buscando tener uno de los dos la razón, mis ojos ardían al ver el sol descendiendo desde lo alto, sentía mucha tristeza y aparentaba confort, quien estaba conmigo me hablaba mil cosas que yo escuchaba a medias y reía, reía para no parecer aburrida, pero en el fondo deseaba haber recorrido ese camino al lado de otra persona.

El camino a casa se me hizo largo oyendo a Dan en la radio del bus, el cielo y mi soledad me hicieron casi llorar pero sin derramar lagrima alguna, solo cerré mis ojos y las imágenes aparecían sin querer. Me cuestioné, me reproché, me lamenté, quise dejar de pensar y solo conseguí agigantar mi dolor, porque duele saber que las cosas no son ni serán como antes, y porque duele vivir con desilusión, con mil dudas abrigando tu destrozado corazón, duele vivir sin vivir.

Mis pasos eran pesados, no sabía lo que hacía o decía, quería parar el tiempo y gritarme a la cara: "¡Ya déjate de cojudeces, piensa en ti y olvida las cosas negativas, que con eso no llegarás a nada bueno!". Pero quise y no pude, me dejé llevar por la siempre disponible depresión, caí y me lamenté, me encerré en los recuerdos, en las cosas que me hicieron reventar de rabia, se vinieron a mi mente todas esas cosas que en esos momentos no supe decir, pero ya era tarde.     

El tiempo sigue jugando conmigo, me ilusiona y me abandona, me alegra y me entristece, me pinta un arcoíris inmenso y luego lo tiñe de negro, me hace creer que todo cambiará y luego vuelve a lo mismo, me hace alzar vuelo y luego corta mis alas para que no pueda volver a volar y ya no quiero esto, ya no quiero seguir saliendo lastimada, ya no quiero curar más heridas, me duele el alma, me duele haber descubierto que el amor es hermoso pero también doloroso, me duele haber descubierto que amarte me duele. 

ANDREA FURIUR