Me he puesto a pensar en todos los problemas que siempre he tenido y la mayoría han sido por dinero. Maldito dinero. Creo que siempre necesitaremos de ese mal necesario por más que nos neguemos a aceptarlo. Desde niña vi cuando mi padre se fue, lo hizo por dinero, lo hizo para tener mejores oportunidades, y claro, lo consiguió, y todo por dinero. Hubiese querido que parte de ese dinero lo compartiera con nosotros, pero de pronto su ambición se volvió tan grande, incluso más grande que él mismo, y se olvidó de nosotros, de su primera familia...
El dinero puede hacer eso, puede hacer que tus seres queridos se transformen en seres distintos, en ratas rastreras, en pedazos de escoria humana, todo por tener más cada día, todo por no saber apreciar lo que realmente tiene valor en esta vida, el amor, la unión familiar, y ojo, no hablo de los seres con los que vivo... Pero aunque no quiero aceptarlo nunca, o casi nunca, hasta yo necesito del dinero, incluso para ser feliz lo necesito, pues quisiera ver felices a mis seres queridos, y eso no lo puedo conseguir si no hay dinero, porque hoy todo se soluciona con dinero, todo.
Quisiera y sé, que me paso de soñadora, al pensar, qué hubiese sido del mundo, sino no hubiese existido el dinero, todo sería mucho mejor, no habría corrupción, no habrían asesinatos por herencias, no habrían robos, no habría nada de todo lo que convierte a nuestro mundo en mierda, todo sería más simple, más fácil, las operaciones de niños discapacitados, enfermos de cáncer y sida, los trasplantes de órganos, la hambruna, ¡Por Dios!, todo seria diferente… Todos trabajarían por lo que quieren y su pago serian sus frutos y todos seriamos felices, pero éste es un mundo ficticio en el que yo busco creer, con el que sueño siempre, porque si todo fuera así de gratis, la vida sería distinta...
Me preocupo por el resto todo el tiempo, es un maldito problema que tengo, el de preocuparme por todos los que quiero, quiero verlos felices, y si yo me siento feliz y ellos no lo están, no puedo gozar, no puedo. Quiero que todo cambie en la vida de mis seres queridos, que al fin seamos recompensados, y no por ser egoístas como mi padre, y marcharnos lejos y olvidarnos de los que nos ayudaron al inicio, ¡NO!, ¡Así no quiero ser!... Sólo quiero hacer las cosas bien y aunque tenga que necesitar del dinero y trabajar para conseguirlo, no haré jamás que eso absorba mis sentimientos y que me convierta en un monstruo manipulador, capaz de todo por conseguir sus objetivos, no dejaré que el dinero me aleje de las personas que amo y que me aman y que valen la pena, ¡NO!, jamás permitiré que el dinero se apodere de mi como se apoderó de mi padre, o como se apoderó de todas las personas que sólo piensan en sí mismas. No dejaré que suceda, no lo haré.
Y si algún día tengo mucho dinero, y no por pisotear a los de mi costado, sino por esfuerzo propio y pasión en lo que hago, si algún día consigo mucho dinero por lo que valgo y no por lo que la gente quiera que valga, si algún día sucede eso, yo sería diferente a toda esta lacra social que me jode conocer. Ayudaría a los demás y vería la forma de ser libre, porque a veces el dinero es tan poderoso, que intenta ser tu dueño y te vuelves una marioneta suya, dañando a los que más amas.
No lo dejes, no se lo permitas...
ANDREA FURIUR
